Nadie sabe si nació siendo de esa manera, o si solía ser humana y con el tiempo fue creciendo una gruesa corteza a su alrededor para protegerla del exterior; lo único que se rumorea es que día un hombre fue lo suficientemente valiente para brindarle su amor, y que ella a su vez también lo amó profundamente, pero el veneno que producía por su innegable naturaleza terminó lastimandolo, haciendo que ella odiase sus propias acciones inconscientes y su naturaleza toxica.
Ésta mujer venenosa vaga por el mundo recordando las espinas que rodean su corazón, las cuales al toque introducen sus puntas ponzoñosas a éste frágil órgano, al mismo tiempo que al de su victima.
0 comentarios:
Publicar un comentario