20 de abril de 2013

Si las paredes pudieran hablar...

Al ir de lugar en lugar, de hotel en hotel, de alcoba en alcoba, me he preguntado qué historias las paredes aguardarán, cuántos sueños habrán cobijado y cuantas conversaciones habrán escuchado.

Si las paredes pudieran hablar me pregunto si contarían las anécdotas que han presenciado. Cómo los humanos al cerrar las puertas se sienten resguardados y libres de hacer sus fechorías  o si por el contrario se sienten aislados, desprotegidos y solitarios.

Me pregunto si observarán a las personas con compasión o con desagrado y reprobación. Si aquella mujer que invita a incontables hombres a hacerle compañía en las noches recibe miradas de reproche, al igual que cuando ese hombre en su profunda soledad intenta darse consuelo en la oscuridad.

¿Las paredes hablarían sobre la violencia que presencian y las palabras llenas de odio que escuchan, como a manera de desahogo? ¿O tal vez preferirían expresar la inmensa felicidad que trajeron niños al iluminar la habitación completa con sonrisas y juegos pasajeros?

¿Las paredes compartirían sus quejas con parte del mobiliario y le darían la razón al armario de que sólo por haber tenido una pelea con su esposo esa señora no tenía derecho de tirar el celular hacia él arruinando su pintura? ¿Las paredes escucharían pacientemente las quejas de la cama después de haber pasado una noche soportando el peso excesivo de un huesped que terminó por doblar y arruinar sus tablas? ¿Y qué tal las quejas y comentarios que se escucharían después de recibir a una pareja en plena luna de miel?

Cuántas palabras de consuelo habrán reprimido al ver personas llorar. Cuantas palabras hirientes habrán presenciado pronunciar. Cuántas conversaciones finales tuvieron lugar entre ellas. Cuántos "te quiero" fingidos y "te extrañé" reales atestiguaron. Cuántas despedidas largas y cuántos encuentros fugaces.

Pobres paredes. Siendo espectadores forzosos de cientos anécdotas y recuerdos.

Menos mal no hablan. No por los secretos que puedan revelar, sino por aquellas desdichas que tendrían que sobrellevar.


19 de abril de 2013


"Y eso es algo terrible."

18 de abril de 2013

Reviveme...

Hay mas de una manera de estar muerto...


17 de abril de 2013

Frase xD

"El que te quiere contigo estará y el que no a la chingada se irá"

La escuché por ahí el otro día xD

15 de abril de 2013

Ya no estas solo :)

"Cuando tienes a alguien a quien extrañas, ya no estas solo"
Natsume Yuujinchou



"When you have someone you miss, you are not alone anymore"
Natsume Yuujinchou


El momento...

Dicen que hay tres cosas en la vida que no vuelven atrás: la flecha lanzada, la palabra pronunciada y la oportunidad perdida...

No tengo muchos años de vida pero han sido los suficientes como para ver pasar muchas personas escribiendo un fragmento en el libro de mi vida y retirándose en silencio. El fragmento que cada persona escribe es único e irrepetible y hace parte de alguna manera de lo que se es ahora.

Hace poco vi que un amigo escribía "Ya se fue el momento", un momento que en un pasado pudo haber existido pero que después de una historia muy larga que ha dañado la cercanía y confianza que se tenia, ahora es impensable.

La palabra pronunciada que lastima más que una flecha tampoco regresa, hiriendo a personas importantes para nosotros. Aunque no era esa nuestra intención, no importa, el daño ya está hecho.

Tanto para bien como para mal, como dice Bunbury en su canción Infinito:

"Un momento se va y no vuelve a pasar"

Los seres humanos han creado frases para reconfortar ese sentimiento que queda al ver que el momento pasó: "no convenía", "las cosas pasan por algo"... Me declaro culpable de creer en alguna ocasión en esas palabras.

Ahora entiendo que no hay que sentir tristeza, sino alegría por haber conocido esas personas tan siquiera por un momento. Se llevaron una parte de ti y te dejaron una parte de ellos. Todas esas personas de alguna manera hacen parte de ti ahora.

Y hay que continuar, con todas esas enseñanzas y recuerdos. Siempre con la cabeza en alto :)